El Congreso de Baja California rechazó por segunda ocasión la iniciativa para permitir el matrimonio igualitario.
Los legisladores se enfrascaron de nuevo en una discusión sobre la socialización o no del tema y la propuesta que regresó al pleno, luego de ser votada en contra hace 15 días; esta vez se quedó a un solo voto.
Obtuvo el respaldo de 16 legisladores pero encontró la oposición de 6 más y la abstención de 3, incluido en esta última parte el morenista Víctor Morán.
También de ese partido votaron en contra Carmen Hernández, Víctor Navarro y Juan Meléndez, junto a las panistas Eva Rodríguez y Loreto Quintero, igual Efrén Moreno que no tiene partido pero es sustituto de Luis Moreno, representante del partido local Transformemos.
Pero la polémica en esta ocasión no estuvo en la fractura de la bancada de Morena de donde salió la iniciativa, sino en la intención de salvar la decisión a favor.
Esto porque la iniciativa además de proponer la reforma constitucional pretendía modificar el código civil, y para esto último son necesarios 13 votos.
El diputado de Morena, Juan Manuel Molina, fue quien hizo la observación y esto provocó un receso en la sesión transmitida vía redes sociales, mientras integrantes de la comunidad LGBT aguardaban la decisión afuera del congreso.
“Se presentó un dictamen, se aprobó un dictamen, apeguémonos a legalidad”, señaló el diputado del Partido Revolucionario Institucional (PRI), David Ruvalcaba, quien había votado a favor.
Sin embargo tras el receso se dio por no aprobado el dictamen 51 que incluía la reforma constitucional y el cambio del código civil.
Miriam Cano, quien presentó la iniciativa, lamentó que fuera desechada por segunda ocasión y apeló a las recomendaciones que previamente había hecho sobre el tema la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
Ahora se vendrán una serie de acciones jurídicas que en el corto plazo tendrán consecuencias legales para el Congreso del estado